En 2023, la economía mundial demostró una notable resiliencia, contrariamente a las predicciones iniciales de varios analistas. La disminución de la inflación global no generó aumentos significativos en el desempleo, y los bancos centrales anunciaron recortes en las tasas de interés para 2024. No obstante, los formuladores de políticas buscan un «aterrizaje suave», enfrentando desafíos continuos.
Desafíos para 2024:
- Recorte de Tasas de Interés: Se anticipa la reducción de tasas de interés ante la disminución de los precios de alimentos y energía, así como la recuperación de la cadena de suministro. Aunque se especula sobre estos recortes, las tasas siguen siendo históricamente altas en países como Europa, Estados Unidos y México, sin esperarse que sean demasiado restrictivas.
- Desaceleración Económica sin Riesgo de Recesión: Se prevé que el crecimiento global disminuirá al 2,6% en 2024, comparado con el 2,9% de 2023, debido a las persistentes tasas de interés elevadas y la desaceleración de las dos mayores economías del mundo. Aunque la incertidumbre en torno a la política monetaria de la Reserva Federal persiste, existe la posibilidad de un aterrizaje suave en Estados Unidos.
- Debilitamiento de la Economía China: Con un crecimiento proyectado del 4.7% en 2023, la economía china muestra signos de desaceleración que podrían afectar las exportaciones globales. Factores como la desaceleración del sector inmobiliario y la búsqueda de destinos de producción alternativos limitan la producción. A pesar de la reapertura en diciembre pasado, la recuperación ha sido frágil.
- Año Electoral 2024: Más de 70 países celebrarán elecciones. Entre los primeros se encuentran Taiwán, Bangladesh y el Reino Unido, seguidos por Pakistán e Indonesia. El evento más destacado será en Estados Unidos el 5 de noviembre. Elecciones importantes también tendrán lugar en Taiwán, Rusia (con Vladimir Putin buscando la reelección), India y México, este último celebrando su proceso electoral más grande en la historia del país en junio.
A medida que ingresamos a 2024, la economía mundial enfrenta desafíos complejos, desde la ajustada política monetaria hasta la desaceleración económica en China. Las elecciones a nivel global añaden capas adicionales de incertidumbre. La resiliencia demostrada en 2023 será crucial en la gestión de estos desafíos, y la atención se centra en cómo los líderes económicos y políticos abordarán estos factores para mantener un crecimiento sostenible y estabilidad en el nuevo año.
